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Anticonsumismo

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El consumo te consume. Esténcil anticonsumista.

El anticonsumismo es una ideología sociopolítica que rechaza al consumismo, entendido como el consumo superfluo y desmedido de bienes y servicios

Es parecido, mas no idéntico, al activismo anticorporativo (anti-corporate activism). Implica la compra desmesurada junto con la posibilidad de acceso a cualquier producto del mercado.

El activismo anticonsumista muchas veces conserva una estrecha relaci�n con el activismo ecol�gico y el altermundismo, y a veces con el activismo en defensa de los animales debido a la oposici�n a las pr�cticas de algunas trasnacionales como McDonald's (v�ase Caso McDonald's Restaurants contra Morris y Steel).

En a�os recientes, ha habido un incremento en el n�mero de libros (Naomi Klein 2000 No logo como el mejor ejemplo) y pel�culas (La corporaci�n, Surplus) que han ofrecido una visi�n ideol�gica anticorporativa al p�blico.

Entorno

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El anticonsumismo generalmente es asociado con la cr�tica al consumo a partir de Karl Marx y Thorstein Veblen, pero seg�n el libro de Veblen Theory of the Leisure Class, los or�genes del consumismo se remontan al mismo principio de las civilizaciones humanas.

El consumismo, tambi�n puede referirse a pol�ticas econ�micas asociadas con la econom�a Keinesiana, y, en sentido abstracto, referirse a la creencia en que la libre elecci�n de los consumidores deber�a regir la estructura econ�mica de la sociedad.[cita requerida] El comediante Bill Hicks y el escritor Pier Paolo Pasolini presentaron una fuerte oposici�n al consumismo.

Pol�tica y sociedad

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Los activistas anticorporativos creen que el aumento de las grandes corporaciones est� amenazando la autoridad leg�tima del estado y de los estratos p�blicos. Se siente que esas corporaciones est�n invadiendo la privacidad de la gente, manipulando la pol�tica y el gobierno, y creando falsas necesidades de consumo.

El tipo de evidencia que soporta estas opiniones incluye la publicidad invasiva (como el adware, el spam, el Telemarketing, etc.), las gigantescas contribuciones econ�micas a candidatos en elecciones democr�ticas por parte de las corporaciones, la interferencia en las pol�ticas de las naciones soberanas, y un sinf�n de historias en el mundo acerca de corrupci�n relacionada con las empresas. Los manifestantes anticonsumistas alegar�an que las grandes corporaciones solo tienen la obligaci�n de responder ante sus accionistas, dando a los derechos humanos y otros aspectos similares poca o ninguna importancia.

En la pr�ctica, la direcci�n de una compa��a s� tiene una responsabilidad primaria por sus accionistas, pues cualquier actividad filantr�pica que no sea �til para la empresa podr�a generar diferencias y rupturas de confianza. Este tipo de responsabilidad financiera significa que las corporaciones multinacionales usualmente buscan estrategias que intensifican el trabajo y tratan de reducir costos.

Por ejemplo, tratan de encontrar (ya sea directamente o a trav�s de empresas de outsourcing o Subcontrataci�n) pa�ses con econom�as basadas en bajos salarios y con leyes que no sean exigentes con los derechos humanos, con las prestaciones laborales, con el Medio ambiente, etc. (ver, por ejemplo, Nike).

V�ase tambi�n

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Enlaces externos

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