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Águila

De Wikipedia, la enciclopedia libre
�guila
Taxonom�a
Reino: Animalia
Filo: Chordata
Clase: Aves
Orden: Accipitriformes
Familia: Accipitridae
Subfamilia: Buteoninae (parcial)

�guila es el nombre dado a las aves de presa, del orden de Accipitriformes,[1]​ (o Falconiformes acorde a una clasificaci�n anterior),[2]​ familia Accipitridae, subfamilia Buteoninae. Pertenecen a varios g�neros, los cuales est�n sujetos a una reclasificaci�n m�s adecuada puesto que los expertos no llegan a una opini�n consensuada. Las �guilas se caracterizan principalmente por su gran tama�o, complexi�n robusta, cabeza y pico pesados. Las diversas especies y subespecies de �guilas pueden encontrarse en casi cualquier parte del mundo excepto en la Ant�rtida.

Como todas las aves de presa, las �guilas poseen un pico grande, poderoso y puntiagudo para desprender la carne de su presa. Cuentan tambi�n con tarsos y garras poderosas. Llama tambi�n la atenci�n la fuerza de las �guilas, que les posibilita alzar en vuelo presas mucho m�s pesadas que ellas. Adem�s poseen una vista extremadamente aguda que les permite visualizar potenciales presas a distancia; por ejemplo, el �guila real posee dos puntos focales en sus ojos, uno para mirar de frente y otro para localizar la mirada hacia los costados escudri�ando a distancia.

Las �guilas han sido utilizadas por muchos pueblos como s�mbolo nacional y especialmente s�mbolo imperial, mostrando tanto poder�o como belleza. Del Imperio romano es que, en general, otros estados han tomado la forma m�s usual del emblema con un �guila; el Imperio bizantino aport� el s�mbolo del �guila bic�fala.

El �guila era sin�nimo de poder para muchos pueblos antiguos como los Mochica del antiguo Per�, mayas y aztecas.

Tambi�n es emblema de ciertos equipos deportivos, principalmente en b�isbol o f�tbol, caso de los equipos �guilas de Mexicali (M�xico), �guilas del Zulia (Venezuela), �guilas Cibae�as (Rep�blica Dominicana), �guilas de Cristo (Venezuela), Club Deportivo �guila (El Salvador), Club Am�rica (M�xico), el equipo argentino de Combate Hist�rico Medieval, Benfica (Portugal) o el Club Deportivo Motagua de Honduras.

Descripci�n

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Las �guilas son aves de presa grandes y poderosas, con cabezas y picos pesados. Incluso las �guilas m�s peque�as, como el �guila calzada (Hieraaetus pennatus), cuyo tama�o es comparable al de un ratonero com�n (Buteo buteo) o un halc�n de cola roja (Buteo jamaicensis), tienen alas relativamente m�s largas y uniformemente anchas, y un vuelo m�s directo y r�pido, a pesar del tama�o reducido de las plumas aerodin�micas. La mayor�a de las �guilas son m�s grandes que cualquier otro raptor aparte de algunos buitres. La especie m�s peque�a de �guila es el �guila serpiente de Nicobar del Sur (Spilornis klossi), con 450 gr y 40 cm. Las especies de mayor tama�o se describen a continuaci�n. Como todas las aves de presa, las �guilas tienen picos muy grandes y ganchudos para arrancar la carne de sus presas, patas fuertes y musculosas y garras poderosas.

El pico suele ser m�s pesado que el de la mayor�a de las aves rapaces. Los ojos de las �guilas son extremadamente potentes. Se estima que el �guila de cola en cu�a tiene una agudeza visual dos veces superior a la de un humano t�pico.[3][4][5]​ Esta agudeza permite a las �guilas detectar presas potenciales a gran distancia. Esta agudeza visual se atribuye principalmente a sus pupilas extremadamente grandes, que garantizan una difracci�n (dispersi�n) m�nima de la luz entrante. Como la mayor�a de las rapaces diurnas, las �guilas tienen poca capacidad para ver la luz ultravioleta.[6]​ La hembra de todas las especies conocidas de �guilas es m�s grande que el macho.[7][8]

Las �guilas suelen construir sus nidos, en �rboles altos o en acantilados elevados. Muchas especies ponen dos huevos, pero el polluelo mayor y m�s grande suele matar a su hermano peque�o una vez que ha salido del cascar�n. Los padres no hacen nada para impedir la matanza.[9][10]​Se dice que las �guilas vuelan por encima de las nubes, pero no es cierto. Las �guilas vuelan durante las tormentas y planean por la presi�n del viento. Esto ahorra energ�a al ave. Debido a su tama�o y potencia, muchas especies de �guilas se sit�an en la cima de la cadena alimentaria como depredadores �pice del mundo aviar. El tipo de presa var�a seg�n el g�nero. Las �guilas Haliaeetus e Icthyophaga prefieren capturar peces, aunque las especies del primero a menudo capturan diversos animales, especialmente otras aves acu�ticas, y son potentes kleptopar�sitos de otras aves. Las �guilas culebreras y serpenteras de los g�neros Circaetus, Terathopius, y Spilornis se alimentan principalmente de la gran diversidad de serpientes que se encuentran en los tr�picos de �frica y Asia. Las �guilas del g�nero Aquila suelen ser las principales rapaces en h�bitats abiertos, capturando casi cualquier vertebrado de tama�o medio que puedan cazar. Donde no hay �guilas Aquila, otras �guilas, como los buteoninos �guila ratonera de pecho negro de Sudam�rica, pueden asumir la posici�n de depredador raptor superior en zonas abiertas. Muchas otras �guilas, entre las que se incluye el g�nero Spizaetus, rico en especies, viven predominantemente en bosques y selvas. Estas �guilas suelen cazar diversos mam�feros y aves arbor�colas o que viven en el suelo, a los que suelen tender emboscadas desprevenidas en entornos tan densos y nudosos. Las t�cnicas de caza difieren entre las especies y los g�neros, y algunas �guilas individuales han empleado t�cnicas muy variadas en funci�n de su entorno y de la presa en un momento dado. La mayor�a de las �guilas agarran la presa sin aterrizar y levantan el vuelo con ella, de modo que la presa puede ser llevada a una percha y desgarrada.[11]

El �guila calva es conocida por haber volado con la carga m�s pesada que se ha comprobado que lleva cualquier ave voladora, ya que un �guila vol� con un cervatillo de ciervo bura de 6,8 kg (15,0 lb).[12][13]​ Algunas �guilas pueden cazar presas mucho m�s pesadas que ellas; estas presas son demasiado pesadas para volar con ellas, por lo que se las comen en el lugar de la muerte o las llevan en trozos a una percha o nido. El �guila real y el �guila coronada han matado ungulados que pesaban hasta 30 kg (66 lb) y un �guila marcial lleg� a matar un duiker de 37 kg, 7-8 veces m�s pesado que el �guila presa.[11][14]​ Los autores especializados en aves David Allen Sibley, Pete Dunne y Clay Sutton describieron as� la diferencia de comportamiento entre las �guilas cazadoras y otras rapaces (en este caso las �guilas calva y real en comparaci�n con otras rapaces norteamericanas):[15]

Tienen al menos una caracter�stica singular. Se ha observado que la mayor�a de las rapaces miran hacia atr�s por encima de sus hombros antes de atacar a la presa (o poco despu�s); al fin y al cabo, la depredaci�n es un arma de doble filo. Todos los halcones parecen tener este h�bito, desde el cern�calo m�s peque�o hasta el ferruginoso m�s grande, pero no las �guilas.

Entre las �guilas se encuentran algunas de las mayores aves rapaces: s�lo el c�ndor y algunos de los buitres del Viejo Mundos son notablemente mayores. Se discute regularmente cu�l debe considerarse la mayor especie de �guila. Pueden medirse en longitud total, masa corporal o envergadura. Las diferentes necesidades de estilo de vida de las distintas �guilas hacen que las medidas var�en de una especie a otra. Por ejemplo, muchas �guilas que viven en los bosques, incluyendo la muy grande �guila arp�a, tienen una envergadura relativamente corta, una caracter�stica necesaria para poder maniobrar en r�fagas r�pidas y cortas a trav�s de h�bitats densamente boscosos.[11]​ Las �guilas del g�nero Aquila, que se encuentran casi exclusivamente en campo abierto, destacan por su capacidad para volar, y tienen alas relativamente largas para su tama�o.[11]

Estas listas de las cinco �guilas m�s grandes se basan en el peso, la longitud y la envergadura, respectivamente. A menos que se indique lo contrario por referencia, las cifras indicadas son la mediana reportada para cada medida en la gu�a Raptors of the World,[16]​ en la que s�lo se listaron las medidas que pudieron ser verificadas personalmente por los autores.[11]

Rango Nombre com�n Nombre cient�fico Masa corporal
1. �guila filipina. Pithecophaga jefferyi 8,3 kg (18,3 lb) (Peso medio)
2 �guila marina de Steller Haliaeetus pelagicus 7,4 kg (16,3 lb) (Peso medio)
3 �guila arp�a Harpia harpyja 6,35 kg (14,0 lb) (Peso medio)
4 �guila de cola blanca Haliaeetus albicilla 4,8 kg (10,6 lb) (Peso medio) [17]
5 �guila marcial Polemaetus bellicosus 4,6 kg (10,1 lb)[17]​ (Peso medio)


Rango Nombre com�n Nombre cient�fico Longitud total
1 �guila filipina Pithecophaga jefferyi 100 cm (3' 32/5")[18]
2 �guila arp�a Harpia harpyja 98,5 cm (3' 24/5")
3 �guila de cola cu�a Aquila audax 95,5 cm (3' 13/5")
4 �guila marina de Steller Haliaeetus pelagicus 95 cm (3' 12/5")
5 �guila coronada Stephanoaetus coronatus 87,5 cm (2' 102/5")
Rango Nombre com�n Nombre cient�fico Envergadura mediana
1 �guila de cola blanca Haliaeetus albicilla 218,5 cm (7' 2")
2 �guila marina de Steller Haliaeetus pelagicus 212,5 cm (6' 11,70")
3 �guila de cola cu�a Aquila audax 210 cm (6' 10,70")[19][20]
4 �guila real Aquila chrysaetos 207 cm (6' 91/2")
5 �guila marcial Polemaetus bellicosus 206,5 cm (6' 9,30")

El �guila como s�mbolo

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V�ase tambi�n Simbolog�a del �guila

�guila bic�fala como emblema del emperador Carlos I de Espa�a

El �guila ha constituido el s�mbolo de la majestad, el poder y la victoria a lo largo de la historia.

En el lenguaje hierogl�fico designaba las ciudades de Heli�polis, Emeso, Antioqu�a y Tiro. Los persas y los epirenses la tomaron los primeros por insignia militar, y posteriormente fue el emblema de la rep�blica romana y de los emperadores de Oriente y de Occidente. El �guila era una figura que se pon�a como atributo en los capiteles de los templos de J�piter.[21]

Her�ldica

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El �guila es una figura her�ldica empleada desde las Cruzadas. Resultante del �guila romana, restituida por Carlomagno, deviene el s�mbolo del imperio y gana una segunda cabeza al momento de la fusi�n entre el Imperio de Oriente y el Imperio de Occidente.

La concurrencia con el le�n es bastante significativa, y se puede usar para marcar supremac�a: ella puede reinar las mismas zonas que el le�n, mientras que el �ltimo no tiene ning�n poder en los aires, que se vuelve autom�ticamente un mundo superior.

El �guila bic�fala es un s�mbolo presente en la iconograf�a y her�ldica de varias culturas indo-europeas y mesoamericanas. En Europa, procede del �guila bic�fala hitita, llegando a la Edad Media occidental a trav�s de Bizancio.

El �guila de San Juan, como s�mbolo del evangelista, se convierte en her�ldica en una parte importante de algunos blasones, sobre todo el que incorpor� Isabel la Cat�lica como soporte al escudo de los Reyes Cat�licos. No debe confundirse con el �guila imperial que aparece en otros muchos como los de los Austrias espa�oles o los zares de Rusia que derivan del escudo de los emperadores bizantinos.

S�mbolo romano

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Denario de Marco Antonio con el s�mbolo del �guila

El �guila tambi�n figuraba como s�mbolo patrio de las legiones romanas. En el segundo consulado de Cayo Mario (104 a. C.) los s�mbolos de animales cuadr�pedos se dejaron de lado como estandartes, conserv�ndose s�lo el �guila (Aquila). Estaba hecha de plata o bronce, con alas extendidas, pero probablemente era de tama�o peque�o, puesto que el portador del estandarte (signifer) bajo Julio C�sar se dice que en circunstancias de peligro arrancaba el �guila de su poste y la ocultaba entre los pliegues de su faja.

Con los emperadores posteriores el �guila se llevaba, como ha ocurrido durante muchos siglos, con la legi�n, llam�ndose por ello a veces la legi�n simplemente aquila.

Insignia militar

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�guila de la guardia imperial francesa

La imagen del �guila tambi�n ha funcionado como insignia militar equivalente al pend�n, bandera o estandarte, que consiste en un asta de lanza en cuyo extremo superior en vez de hierro o moharra, hay un �guila. T�ntalo, rey de Lidia, fue el primero que us� de las �guilas como insignia guerrera. Los romanos la tomaron de los persas y de los epirotas y la colocaban a la cabeza de cada legi�n durante las marchas, pasando al centro luego que comenzaba una batalla.

Carlomagno adopt� el �guila como guion de sus tropas. Napole�n I la dio a los regimientos de su guardia y la pase� triunfante por todas las naciones de Europa, hasta que la guerra de Espa�a y los desastres de Rusia la hicieron perder el prestigio de invencible. Durante la restauraci�n de los Borbones quedaron abolidas las �guilas en Francia, pero el advenimiento al trono de Napole�n III resucit� esta ense�a que se llen� de gloria en Crimea y en Italia.[22]

Alquimia

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En alquimia, el �guila tiene el siguiente significado:

  • �guila blanca: mercurio dulce.
  • �guila negra: esp�ritu de cadmia venenosa o cobalto que se supone ser materia del mercurio filos�fico
  • �guila celeste: especie de panacea o remedio contra todos los males. Es una preparaci�n de mercurio reducido a esencia.
  • �guila de Venus: azafr�n compuesto de cardenillo por medio de un fuego de reverbero al cual se a�ade sal amon�aco algunas veces sublimado.
  • �guila volante: mercurio sublimado.
  • �guila dilatada: sal amoniaco sublimado.
  • �guila devorando al le�n: volatilizaci�n del fijo por lo vol�til o del azufre por el mercurio de los sabios.[21]

Numism�tica

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El �guila es una representaci�n habitual de las monedas y es signo de la divinidad o del imperio.

V�ase tambi�n

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�guila calva, s�mbolo nacional de Estados Unidos
�guila mochica, Museo Larco, Lima (Per�)
�guila (Geranoaetus melanoleucus) domesticada

Tambi�n reciben el nombre de �guilas las siguientes especies:

Referencias

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  1. Clements, J.F.; T.S. Schulenberg, M.J. Iliff, B.L. Sullivan, & C.L. Wood (2010). «The Clements Checklist of Birds of the World, Version 6.5» (xls). Cornell University Press. Archivado desde el original el 2 de junio de 2011. Consultado el 12 de junio de 2011. 
  2. Clements, J. F. (2007). The Clements Checklist of Birds of the World, 6th Edition. Cornell University Press. Cornell Lab of Ornithology.
  3. Mitkus, Mindaugas; Potier, Simon; Martin, Graham R.; Duriez, Olivier; Kelber, Almut (26 de abril de 2018), 0001/acrefore-9780190264086-e-232 «Visión de raptor», Oxford Research Encyclopedia of Neuroscience, ISBN 978-0-19-026408-6, doi:10.1093/acrefore/9780190264086.013.232, consultado el 12 de junio de 2023 .
  4. Martin, Graham R. (Enero 1986). «Visión: Los defectos del ojo del águila». Nature (en inglés) 319 (6052): 357. Bibcode:1986Natur.319..357M. ISSN 1476-4687. PMID 3945316. S2CID 4233018. doi:10.1038/319357a0. 
  5. Reymond, L. (1985). «Agudeza visual espacial del águila Aquila audax: una investigación conductual, óptica y anatómica». Vision Research 25 (10): 1477-1491. ISSN 0042-6989. PMID 4090282. S2CID 20680520. doi:10.1016/0042-6989(85)90226-3. 
  6. Mitkus, Mindaugas; Potier, Simon; Martin, Graham R.; Duriez, Olivier; Kelber, Almut (26 de abril de 2018), «Visión de las rapaces», Oxford Research Encyclopedia of Neuroscience, ISBN 978-0-19-026408-6, doi:10.1093/acrefore/9780190264086.013.232, consultado el 12 de junio de 2023 .
  7. Leclerc, Georges (2010). La Historia Natural de las Aves: Del francés del Conde de Buffon; ilustrado con grabados y un prefacio, notas y adiciones del traductor. Cambridge University Press. pp. 60-. ISBN 978-1-108-02298-9. Archivado desde el original el 29 de abril de 2016. 
  8. Grambo, Rebecca L. (2003). Eagles. Voyageur Press. ISBN 978-0-89658-363-4. Archivado desde el original el 30 de abril de 2016. 
  9. Grambo, Rebecca L (2003). Eagles. Voyageur Press. p. 32. ISBN 978-0-89658-363-4. 
  10. Stinson, Christopher H (1979). «On the Selective Advantage of Fratricide in Raptors». Evolution 33 (4): 1219-1225. JSTOR 2407480. PMID 28563923. doi:10.2307/2407480. 
  11. a b c d e Ferguson-Lees, J.; Christie, D. (2001). Raptors of the World. London: Christopher Helm. ISBN 0-7136-8026-1. 
  12. «Amazing Bird Records». Trails.com. Archivado desde el original el 20 de junio de 2017. Consultado el 20 de julio de 2012. 
  13. «Un ciervo abatido por un águila deja sin electricidad a Montana». Reuters. 18 de junio de 2011. Consultado el 11 de julio de 2023. 
  14. Watson, Jeff (2011). The Golden Eagle (Second edición). Yale University Press. ISBN 978-0-30017-019-1. 
  15. Sutton, C.; Dunne, P.; Sibley, D. (1989). Hawks in Flight: La identificación en vuelo de las rapaces migratorias norteamericanas. Boston: Houghton Mifflin Harcourt. ISBN 0-3955-1022-8. 
  16. Ferguson-Lees, et al.
  17. a b del Hoyo, J; Elliot, A; Sargatal, J (1996). Handbook of the Birds of the World 3. Lynx Edicions. ISBN 84-87334-20-2. 
  18. Gamauf, A.; Preleuthner, M.; Winkler, H. (1998). «Philippine Birds of Prey: Interrelations among habitat, morphology and behavior». The Auk 115 (3): 713-726. JSTOR 4089419. doi:10.2307/4089419. Archivado desde pdf el original el 23 de agosto de 2014. 
  19. Morgan, A.M. asn.au/saopdfs/Volume%2011/1932V11P156.pdf «La extensión y el peso del águila de cola en cuña». South Australian Ornithologist 11: 156-157. Archivado desde el original el 24 de abril de 2013. 
  20. Wood, Gerald (1983). The Guinness Book of Animal Facts and Feats. Guinness Superlatives. ISBN 978-0-85112-235-9. 
  21. a b Diccionario nacional o Gran Diccionario clásico de la lengua española, Ramón Joaquín Jiménez, 1840.
  22. J.D.W.M (1863). Diccionario militar: contiene las voces técnicas, términos, locuciones y modismos antiguos y modernos de los ejércitos de mar y tierra. Imp. D. Luis Palacios. pp. 17-. 

Enlaces externos

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