Francisco Paraj�n Montealegre
| Francisco Paraj�n Montealegre | ||
|---|---|---|
| Informaci�n personal | ||
| Nombre de nacimiento | Juan Francisco Paraj�n Montealegre | |
| Nacimiento | Telica, Nicaragua | |
| Fallecimiento |
1961 Le�n, Nicaragua | |
| Informaci�n profesional | ||
| Ocupaci�n | Pol�tico | |
| A�os activo | 1926 - 1961 | |
| Lealtad | Nicaragua | |
| Rama militar | Ej�rcito | |
| Unidad militar | Ej�rcito Liberal Constitucionalista | |
| Mandos | Ej�rcito Liberal Constitucionalista de Occidente | |
| Rango militar | General | |
| Conflictos |
Guerra Constitucionalista Batalla de Chinandega Combate de Las Grietas | |
Juan Francisco Paraj�n Montealegre fue un militar y pol�tico nicarag�ense de ideolog�a liberal que se levant� en armas durante la Guerra Constitucionalista (1926-1927) actuando como organizador y general en jefe del llamado Ej�rcito Liberal Constitucionalista de Occidente cuya �rea geogr�fica de operaciones abarc� los departamentos de Le�n y Chinandega.
Rese�a biogr�fica
[editar]Sus padres fueron Juan Francisco Paraj�n y Rafaela Montealegre Romero.[1]
Realiz� estudios militares y se gradu� de la Academia Polit�cnica Militar de Nicaragua fundada durante el gobierno de Jos� Santos Zelaya.
Durante un tiempo perteneci� al Partido Nacional de los Trabajadores (PTN) de Nicaragua.
Participaci�n en la guerra constitucionalista
[editar]Cuando el 17 de enero de 1926 se da el golpe de Estado de Chamorro contra el gobierno del presidente Carlos Sol�rzano conocido como "El Lomazo", trabajaba tranquilamente en su finca cerca de Posoltega.
Reuniendo seis hombres armados de machetes y revolveres decidi� iniciar por su cuenta una guerra de guerrillas en el occidente del pa�s.
Antecedentes
[editar]En el mes de agosto de 1926 se esperaba el desembarque de armas provenientes de M�xico en "El Tamarindo" en las costas del departamento de Le�n, como parte de la estrategia liberal constitucionalista de abrir dos frentes de guerra; uno en la entonces llamada Costa Atl�ntica (ahora Costa Caribe para marchar desde Puerto Cabezas, que reci�n estaba en proceso; y el otro en la regi�n del Pac�fico, m�s espec�ficamente en el occidente.
Informado y alertado con anticipaci�n el gobierno conservador de D�az del programado desembarque en "El Tamarindo", el 19 de agosto de 1926 las fuerzas conservadoras al mando del general Marcos A. Benavente derrotan a las fuerzas liberales que al mando del General Montoya, junto con el General Augusto Caldera y del Coronel Santiago Callejas, y otra columna de 150 hombres al mando del General Figueroa iban a servir de apoyo terrestre.
En este combate murieron Renato Montealegre y el General Montoya. Cayeron prisioneros el General Jos� Mar�a Zelaya y el Coronel Andr�s Largaespada. Y sali� herido en la cara el General Francisco Paraj�n, refugi�ndose en "El Malpa�s" en el municipio de Telica.
Al haberse retrasado el barco "Tropical", este tuvo que enrumbarse primero a puerto Corinto donde no pudo atracar, oblig�ndose a enrumbar hacia Cosig�ina y desembarcar en puerto Potos� (municipio de El Viejo), lugar donde despu�s de una lucha intensa y valiente el contingente liberal invasor muy inferior num�ricamente (120 hombres) al mando del General Samuel Sediles, Juli�n Vanegas, Roberto Bone y Rub�n Narv�ez Garc�a fueron completamente derrotados por las fuerzas del gobierno conservador (3.500 hombres bien equipados), al mando del General Roberto Hurtado asistido por los generales Carlos Rivers Delgadillo, coroneles Benjam�n Vidaurre y Marcos Potosme Macanches.
Combate en Las Grietas
[editar]Mientras tanto en Le�n, el General Francisco Paraj�n con un peque�o ej�rcito era perseguido tenazmente por el General Alfredo Noguera G�mez al mando de una fuerza de 800 hombres bien equipados. La estrategia del General Paraj�n era ser perseguido para emboscarlo en lugar previamente asegurado.
El 2 de noviembre, el General Paraj�n junto con el hondure�o General Felipe T. Flores como segundo al mando, logra emboscar en la hacienda "Las Grietas" (comarca de Olomega) a las fuerzas del General Noguera G�mez provoc�ndole una derrota muy significativa, por la gran cantidad de muertos y heridos ocasionados, pero principalmente por el bot�n de guerra (tres ametralladoras, 300 rifles, 60.000 cartuchos, mas comestibles, harina, calzado y dinero) que paso a manos de las fuerzas liberales del General Paraj�n, quien lament� mucho la muerte del Coronel Lagos.
No obstante, este �xito inicial, cometi� un error t�ctico al dejar libre al general Noguera G�mez de sufrir otra derrota a�n m�s desastrosa; mientras que, los hombres bajo su mando se hubiesen dotado de otras 36 ametralladoras y 40 carretadas de provisiones y municiones.
El entusiasmo de los "Coroneles de El Viejo", por este triunfo y de otros combates menores, fue de tal naturaleza, que poniendo a un lado el "Plan Pil�n" del General Paraj�n, consistente de volver a emboscar en ese lugar o en "El Socorro", para acabar a las fuerzas del General Noguera G�mez, quien lo ven�a siguiendo despu�s de haberse reabastecido y formar una fuerza de 2.000 hombres bien armados.
Toma de Chinandega
[editar]Paraj�n, envalentonado, despu�s de llegar el 4 de febrero a San Juan de las Pencas, opto por marchar a todo trance sobre la ciudad de Chinandega para tomarla (el prop�sito era estrat�gicamente correcto, pero el momento no lo era).
El plan del asalto sorpresa fracaso cuando un telegrafista que fue apresado d�as antes huy� y aviso al general Bartolom� Viquez, comandante conservador en la ciudad, quien realiz� las acciones necesarias para resistir el asedio atrincher�ndose en las iglesias de El Calvario y Santa Ana, no si antes haber establecido un per�metro de varias cuadras alrededor de ambos templos.[2]
A pesar de todo, Paraj�n recibe entusiasta la incorporaci�n del mayor Francisco Sequeira Moreno (el famoso "Chico Cabuya") quien, despu�s de derrotar al Coronel conservador F�lix Astacio, se une al ej�rcito liberal constitucionalista al mando de 100 hombres armados con rifles Conc�n de las que hab�an desembarcados del vapor "Tropical" en Cosig�ina provenientes de M�xico.
Definido el plan de ataque, con una fuerza de 500 hombres, se determin� atacar las dos fortalezas principales, las iglesias El Calvario y Santa Ana, donde se hab�an establecidos las tropas conservadoras para defender la plaza, al mando del General Bartolom� V�quez ("La Julumga").
El Calvario era defendido, bajo el mando del Coronel Arturo Lejarza y los Mayores Julio y Miguel Cuadra Sotomayor, con una fuerza de 250 hombres. El ataque a este fuerte, lo hizo la columna al mando del Coronel Felipe T. Flores junto con el Mayor Paulino Norori, y los Capitanes Guillermo Esquivel, Gregorio Moreno, y Jos� �ngel Carias Requeno. Con apoyo de los tenientes Guillermo Esquivel, Gonzalo Evertz, Pablo Lara y el Mayor Francisco Sequeira Moreno.
Santa Ana era defendida al mando del General V�quez con una fuerza de 400 hombres. El ataque a este fuerte, fue dirigido por el General Paraj�n, acompa�ado de los coroneles Jos� Mar�a Ulloa (Pelele), Antonio Arvizu, Juan de Dios Altamirano, Mariano Gonz�lez y el Capit�n Jos� Hern�ndez; as� como el Doctor Venancio Berrios que era auditor de guerra y el jefe de artiller�a era el Coronel Manuel Medina.
Los Mayores Ciriaco Aguilera y Carlos Salgado apostados a la entrada de Chinandega v�a hacia Le�n, ser�an encargados de cortar las comunicaciones con Managua.
El Capit�n Jos� F�lix Baltodano, apostado para defender la entrada del lado hacia puerto Corinto.
Vida pol�tica
[editar]Las ruinas de Le�n Viejo fueron descubiertas en abril de 1931 por don Luis Cuadra Cea, en mayo de ese mismo a�o, el descubridor prepar� una segunda expedici�n a las ruinas de Le�n Viejo, siendo Paraj�n alcalde de la ciudad de Le�n, dict� para el efecto, un acuerdo especial que oficializó el auspicio de la municipalidad.
Para 1946 ostentaba el grado de General de Brigada G.N. y actuaba como Ministro de la Guerra, Marina y Aviación por la Ley.[3]
Siendo miembro del P.L.N. fue convencional y diputado electo por Occidente al Congreso Nacional de Nicaragua durante varios periodos legislativos.
Véase también
[editar]Referencias
[editar]- ↑ Rivera Montealegre, Flavio. Genealogia de la familia Montealegre: Sus Antepasados en Europa y sus descendientes en América. Trafford Publishing, 2011. ISBN 1466903007, 9781466903005. Pag. 53.
- ↑ De Nogales Méndez, Rafael. El saqueo de Nicaragua. Linkgua digital, 2010. ISBN 8490075050, 9788490075050. Pag.s 140-141.
- ↑ Decreto Ley. [1]
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Datos: Q19886358