Tom�s Serrano

Tom�s Serrano
Informaci�n personal
Nacimiento	7 de noviembre de 1715 Castalla (Espa�a)
Fallecimiento	1 de febrero de 1784 (68 a�os) Bolonia (Estados Pontificios)
Nacionalidad	Espa�ola
Religi�n	Catolicismo
Informaci�n profesional
Ocupaci�n	Cr�tico literario
Orden religiosa	Compa��a de Jes�s

Tom�s Serrano y P�rez (Castalla, provincia de Alicante, 7 de noviembre de 1715 - Bolonia, 1784) fue un sacerdote jesuita, escritor y latinista espa�ol.

Biograf�a

De padres labradores, ingres� en la Compa��a de Jes�s y fue maestro de ret�rica en el colegio de San Pablo de Valencia al menos hasta 1747; en efecto, por entonces se dio a conocer como poeta y dramaturgos en lat�n human�stico a trav�s de diversas composiciones que circulaban manuscritas o piezas teatrales representadas en los colegios. Luego ocup� una c�tedra de teolog�a en la Universidad de Gand�a.

Fue llamado para hacer la relaci�n de las fiestas con que la ciudad de Valencia celebr� el tercer siglo de la canonizaci�n de San Vicente Ferrer, que fue publicada (Fiestas seculares con que la coronada ciudad de Valencia celebr� el feliz cumplimiento del tercer siglo de la canonizaci�n de su esclarecido hijo, y �ngel protector, S. Vicente Ferrer, ap�stol de Europa, Valencia, 1761).

En Valencia hizo su cuarto voto y le cogi� la expulsi�n en 1767. Siguiendo a sus dem�s compa�eros fue trasladado a Cerde�a y luego a los Estados Pontificios; al cabo se estableci� en Ferrara.

Fue miembro de la Academia Ariostea, llamada as� en honor del gran poeta del renacimiento italiano Ludovico Ariosto; en ella ley� alguno de sus poemas en lat�n. Las cr�ticas despreciativas de Girolamo Tiraboschi a la cultura espa�ola y en especial a los poetas y escritores hispanos de la edad de plata le hizo escribir sus dos famosas Ep�stolas a Clemente Vannetti en defensa de S�neca, Lucano, Marcial y los otros autores denostados por el cr�tico italiano.

Destaca en esta obra en especial la defensa de Marco Valerio Marcial, por cuyos epigramas Serrano ten�a una devoci�n y admiraci�n sin l�mites y a quien dedic� grandes trabajos exeg�ticos. En cambio, Tiraboschi pospon�a siempre al poeta bilbilitano a Catulo. Llevando al extremo sus trabajos de ex�gesis compuso un manuscrito titulado M. Valerii Martialis Roma que describ�a la sociedad romana contempor�nea de Marcial usando casi exclusivamente sus textos. El libro se divid�a en "Roma F�sica", o descripci�n topogr�fica de Roma; a este cap�tulo segu�an "Roma religiosa, Roma moral, pol�tica, guerrera", etc�tera. Incluso trat�, contra la inmoralidad que se le sol�a achacar a Marcial, de extraer de sus epigramas un curso completo de moral; sin embargo, estos manuscritos in�ditos han desaparecido o no se sabe d�nde han ido a parar. Pero no se limitaron a estas dos obras sus trabajos: compuso unas Cuestiones Eridanas, di�logo en que trata la cuesti�n de la presunta superioridad de Catulo sobre Marcial, que qued� inconclusa e in�dita; un Museum Hispanum o "Museo espa�ol" que conten�a una serie de epigramas de un d�stico eleg�aco cada uno para situarlo al pie de las efigies de los varones ilustres espa�oles, dividida en dos partes, "Museum Vetus" y "Museum Novum".

Tambi�n dej� el manuscrito de una Hispania Arabica de naturaleza parecida al Museum. Dio adem�s en el artificio de encerrar en setenta y nueve versos s�ficos las setenta y nueve ciudades espa�olas que dispon�an de ceca, esto es, derecho de acu�ar moneda, e imprimi� el texto en Bolonia el 21 de noviembre de 1781; cuatro a�os despu�s se reimprimi� en Valencia. Adem�s, escribi� un comentario de este poema: Vera Hispaniae Effigies ex antiquis numismatis expressa.

El padre Miguel Garc�a, importante poeta c�mico, public� p�stuma en Foligno (1788) una colección de poemas de su amigo Serrano precedida de una biobibliografía gracias a la cual conocemos al menos los méritos del humanista español y otras obras extraviadas o desaparecidas: una Historia de los venerables religiosos del convento de Gandía, una Disertación crítica sobre el poeta arcediano de Évora Luís António Verney, más conocido como Padre Barbadiño; un libro de tropos y figuras ilustradas con ejemplos de los mejores poetas castellanos, compuesto para sus alumnos de Valencia; una Hispania poética, o séase, Historia de la poesía española, ya dispuesta para la impresión pero lastimosamente perdida y, por último, varias poesías, entre ellas un romance a la proclamación de Fernando VI en Valencia.

Como poeta latino tuvo por modelos a Marcial, John Owen y Jaime Falcó, y su género favorito fue el epigrama; su sentido crítico le hizo destruir muchos de estos partos del ingenio, como cuenta García: «Parva et pauca dedit, plura et maiora daturus / si minus ipse sibi displicuisset erat.»​

Notas

• Datos: Q16640872